Por: Nan Garcia, la CRACK de los seguros – 11/octubre/2025
¿Sabes qué es más sexy que un ramo de flores o una cena romántica?
Tener tus finanzas en orden.
Sí, leíste bien. No hay gesto de amor más poderoso que cuidar tu futuro financiero. Porque pagar tus deudas, ahorrar con propósito y proteger lo que amas no es solo un tema de dinero… es un acto profundo de amor propio.
Durante años nos enseñaron a ver el dinero como algo frío, complicado o hasta “malo”. Nos dijeron que hablar de dinero era de gente interesada. Pero te tengo una noticia: el dinero es energía, y cómo lo usas refleja cómo te tratas a ti mismx. Si gastas sin control, si postergas tu ahorro o si vives estresado cada quincena, no es un tema de números… es un tema de autoestima.
El espejo financiero
Tus finanzas son un espejo de tu relación contigo. Cuando te sientes merecedor, ahorras. Cuando confías en ti, inviertes. Cuando te amas, te proteges. Así de simple.
Por eso, cuando alguien me dice “Nan, no me alcanza para ahorrar”, yo no le hablo de fórmulas complicadas, le hablo de decisiones conscientes. Porque sí alcanza. Lo que no alcanza es la claridad. Ahorrar no es tener dinero de sobra, es tener una prioridad clara: tú.
Cuidarte también es prevenir
Piensa en esto: ¿por qué aseguras tu auto pero no tu salud o tu retiro?
Cuidarte financieramente no es vivir con miedo, es vivir con inteligencia emocional y visión a futuro.
Un seguro de vida, un plan para el retiro o un fondo de emergencia no son “gastos”, son declaraciones de amor. Son tu forma de decirte: “me importo lo suficiente para estar bien, incluso cuando las cosas no salgan como planeo”.
La conversación más incómoda (y más liberadora)
Hablar de dinero contigo mismx puede doler.
Darte cuenta de lo que gastas para llenar vacíos emocionales, de lo que postergas porque te da miedo crecer o de las veces que eliges complacer antes que invertir en ti… eso duele.
Pero justo ahí empieza la sanación financiera: cuando te ves sin juicio, con honestidad y con deseo de mejorar.
De la culpa al poder
Deja de castigarte por lo que no hiciste.
El pasado financiero no define tu futuro.
Empieza hoy: abre tu app del banco, mira tus gastos, ponle nombre a tus metas y diseña un plan realista. Aunque sean $500 al mes, aunque empieces tarde, aunque tengas deudas. Lo importante no es la cantidad, es la intención con la que lo haces.
Porque cuando eliges ahorrar, invertir y protegerte, no estás moviendo dinero: estás moviendo energía, autoestima y amor.
Así que la próxima vez que hables de dinero, no pienses en sacrificio. Piensa en amor. Porque las finanzas sanas no se tratan de tener más, sino de tratarte mejor.
Y recuerda:
Amarte también es planear tu futuro.
Soy Nan García, la CRACK de los seguros, y estoy aquí para recordarte que tu versión más libre también se construye con decisiones financieras inteligentes.
TBDM 